
**El oro líquido de Jaén: el aceite de oliva**
En la región de Jaén, en el sur de España, se encuentra uno de los mayores tesoros gastronómicos del país: el aceite de oliva. Conocida como la capital mundial del aceite de oliva, Jaén es hogar de extensos olivares que producen un aceite de alta calidad y reconocido a nivel internacional.
El aceite de oliva es una parte fundamental de la dieta mediterránea y se ha utilizado en la cocina y la medicina desde tiempos ancestrales. En Jaén, la tradición olivarera se remonta a siglos atrás, siendo un motor económico y cultural de la región.
El clima favorable, la variedad de aceitunas y las técnicas de cultivo tradicionales hacen que el aceite de oliva de Jaén sea único en sabor y calidad. La Denominación de Origen Protegida «Jaén» certifica la excelencia de este producto, garantizando su origen y proceso de producción.
Además de su uso en la cocina, el aceite de oliva de Jaén también tiene beneficios para la salud, gracias a su alto contenido de ácidos grasos monoinsaturados y antioxidantes. Se ha demostrado que su consumo regular ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y a mantener una piel saludable.
Por todo esto, el aceite de oliva de Jaén es mucho más que un ingrediente culinario, es un símbolo de la tradición y la excelencia de la gastronomía española. En cada gota de este «oro líquido» se encuentran siglos de historia, pasión y sabor mediterráneo.