**El calendario de santos: Santa Ana y San Joaquín celebrados el 26 de julio en honor a María y Jesús**
Cada año, el 26 de julio, la Iglesia Católica celebra la festividad de Santa Ana y San Joaquín, los padres de la Virgen María y abuelos de Jesús. Esta fecha es una celebración especial en honor a la familia sagrada de Jesucristo y es una oportunidad para reflexionar sobre el papel crucial que estos santos desempeñaron en la historia de la salvación.
Santa Ana y San Joaquín son conocidos como los padres de la Virgen María, y por extensión, los abuelos de Jesús. Aunque no se mencionan en las Escrituras, la tradición cristiana les atribuye un papel importante en la vida de María y en la preparación del camino para la llegada del Salvador.
Santa Ana, cuyo nombre significa «gracia» o «compasión», es venerada como la patrona de las mujeres embarazadas, las madres y las abuelas. Se la representa como una mujer sabia y piadosa, conocida por su fe inquebrantable y su devoción a Dios.
San Joaquín, cuyo nombre significa «preparación del Señor», es considerado el patrono de los padres de familia, los abuelos y los trabajadores. Se le representa como un hombre justo y trabajador, que educó a María en la fe y la guió por el camino de la virtud.
La festividad de Santa Ana y San Joaquín es una ocasión para recordar la importancia de la familia en la vida cristiana, así como para valorar el papel de los padres y abuelos en la transmisión de la fe a las generaciones futuras. También es una oportunidad para honrar la memoria de estos santos y pedir su intercesión en nuestras vidas.
En este día especial, recordamos la figura de María, la madre de Jesús, quien desempeñó un papel central en el plan de salvación de Dios al dar a luz al Hijo de Dios. María es venerada como la madre de la Iglesia y como un ejemplo de fe, humildad y obediencia.
Jesús, el Hijo de Dios, es el centro de nuestra fe y nuestra devoción. En la festividad de Santa Ana y San Joaquín, recordamos que Jesús nació de una familia santa y que su llegada al mundo fue el cumplimiento de las promesas de Dios.
Que en este día de celebración, podamos reflexionar sobre la importancia de la familia en nuestra vida cristiana, buscar la intercesión de Santa Ana y San Joaquín, y encomendar nuestras vidas a María y a su Hijo Jesús, quienes nos guían y nos sostienen en nuestro camino de fe. ¡Feliz fiesta de Santa Ana y San Joaquín!
